Día 3: Tren Oslo – Røros
Después del desayuno dirígete a la estación de tren donde cogerás un tren que te llevara al antiguo pueblo minero de Røros, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1980. Se trata de una idílica localidad fundada en 1646 y construida en su totalidad con casas de madera. Te dará la sensación de haber viajado en el túnel del tiempo, es como si el tiempo se hubiera detenido en Røros, donde hay en total unas 2000 casas de madera bien conservadas. Paseando entre su calles principales encontrarás un agradable ambiente local, tiendas de artes y artesanía, pequeñas tiendas con encanto y restaurantes que sirven comida local elaborada con productos de temporada. Al pasear por Røros le da a uno la sensación de encontrarse en un museo al aire libre. Lo más increíble es ver cómo los habitantes actuales de Røros siguen trabajando y viviendo en edificios típicos del siglo XVII y XVIII. En la calle Slegveien, al otro lado del río, es donde se encuentran algunas de las casas más antiguas. Desde el río tendrás buenas vistas del centro de la ciudad y su iglesia. Cruza el río de nuevo para dirigirte al museo de Smelthytta, construido sobre las ruinas de una fundición de cobre y situado en un bonito enclave. Noche en Røros.
Dispondrás de un kicksled para desplazarte por las calles cubiertas de nieve de este idílico lugar.
Hotel: Erzscheidergaarden (4*)